
Estaba preparando un artículo sobre la Prima de Riesgo para un cliente cuando sin saber cómo me he encontrado en medio de un foro leyendo lo que opinaba la gente acerca de un restaurante chino que hay en Bilbao (¿?). Y bueno, he leído algo que me ha hecho escribiros el post de hoy aún sin tener intención alguna de tratar el asunto, pues pensaba que había quedado en poco más que una leyenda urbana; pero ya veo que no. Me refiero a aquello de que “los chinos no pagan impuestos en España”.
Seguro que en alguna ocasión habéis escuchado la frase de marras, ¿verdad? Bueno, pero, ¿qué hay de realidad aquí? Os voy adelantando la respuesta: nada.
Los chinos no pagan impuestos en España
Voy a ser breve. Los negocios chinos no tienen ventaja alguna respecto a los nacionales, y como os podréis imaginar en el área impositiva tampoco. Tienen que constituirse de la misma forma, sea a través del alta en el RETA o creando sociedades; deben hacer frente al IVA y al IRPF o Impuesto de Sociedades; y a diferencia de lo que algunos dicen, también tienen que pagar la bendita cuota de autónomos. Sean independientes o autónomos societarios.
[stextbox id=»info»]Lectura recomendada: “Cómo facturar sin ser autónomo: cooperativas de trabajo asociado”.[/stextbox]
Entonces, ¿cómo es que pueden permitirse emprender de la manera en la que lo hacen si los bancos están cerrando el grifo crediticio? Ya os digo que no reciben dinero ni del Gobierno de Pekín ni de una organización secreta de ojos rasgados y trajes de Kung Fu. Tampoco tienen ventajas especiales en las entidades bancarias o con los avales públicos. El dinero básicamente sale de préstamos privados obtenidos dentro de la comunidad china. Unas veces recurriendo a familiares y otras a prestamistas.
Y por cierto, también es falso aquello de que van rotando la titularidad de la empresa cada cinco años para obtener desgravaciones especiales o para no pagar IVA. Sí es cierto que tienen acceso a ayudas sociales, pero a las mismas que cualquier otro emprendedor radicado en nuestro país. De hecho las utilizan menos, puesto que la tasa de desempleo dentro de esta comunidad es ínfima.
Doble tributación con China
Ahora bien, sí que hay en vigor un convenio firmado con China en 1990 a través del cual se evita la doble tributación. Es decir, que las empresas españolas que estén allí pagarán los impuestos de renta y capital en la hacienda asiática; pudiendo retornar a posteriori dinero a España sin peligro de tener que volver a tributar. Lo mismo pasa con las empresas chinas asentadas en España, que pagan aquí sus impuestos y tienen vía libre para llevarse los beneficios a China. Un tratado lógico, ¿no? Pues también lo tenemos con otros 70 países.
Espero que este post os haya aclarado las cosas. No obstante, si tenéis cualquier comentario, dejadlo más abajo y os respondo rápidamente. Podéis echar un vistazo a la web de StopRumores para ampliar información. ¡Nos vemos!